Primero, juega piedra, papel o tijera para decidir quién empieza. Luego, aumenta el número de monstruos eligiendo las mejores cartas. Asegúrate de tener más monstruos que tu oponente.
¡Simplemente toca una carta para usarla!
No te olvides de las cartas de proyectil: puedes reducir los monstruos de tu oponente usándolas, pero tu oponente también, así que ten cuidado.