El juego se centra en un concepto único y atractivo. En el centro del campo de juego, hay un núcleo esférico alrededor del cual se encuentran fijadas varias bolas de colores. Este conjunto, compuesto por el núcleo y sus bolas, gira, lo que añade un desafío dinámico al juego. El objetivo del jugador es disparar una bola del color que tenga equipado. Tras disparar, el color de la siguiente bola cambia, lo que permite al jugador volver a disparar.
Para tener éxito, el jugador debe apuntar a un grupo de bolas del mismo color. Si acierta un grupo de tres o más bolas del mismo color, estas se destruyen, despejando parte del campo. Sin embargo, si acierta una bola de un color diferente, la bola disparada se adherirá al grupo, lo que podría complicar la estrategia del jugador.
El objetivo final del juego es despejar suficiente espacio para que un disparo pueda alcanzar el núcleo y destruirlo. Esto requiere planificación estratégica y precisión en los disparos para garantizar que las bolas se eliminen eficientemente, evitando que el campo de juego se congestione demasiado y manteniendo despejado el camino hacia el núcleo. El aspecto giratorio del núcleo y sus bolas adjuntas agrega una capa de complejidad, desafiando a los jugadores a cronometrar sus tiros y predecir el movimiento de sus objetivos.