En una ciudad de ciencia-ficción bastante alucinante, los hombres tienen miedo al volver a sus casas de noche; miedo de sus mujeres lobo y de sus mujeres cucaracha radiactivas. En Movidas que vio Casandra hay piratas travestidas, mujeres duelistas, brujas, mujeres desastrosas, despechadas, enfadadas, cachondas... Todas ellas al borde del colapso pero guerreando, con furia y humor, contra los problemas de género enquistados en las vidas de las mujeres durante siglos.