En la 75.a Asamblea Mundial de la Salud, celebrada en mayo de 2022, la OMS estableció un marco de armonización para fortalecer la arquitectura mundial de preparación, respuesta y resiliencia frente a las emergencias sanitarias. En el marco de la arquitectura mundial propuesta, la capacidad efectiva de prevención, preparación, detección, respuesta y recuperación ante emergencias sanitarias a nivel subnacional, nacional, regional y mundial depende de la disposición operativa y las capacidades en cinco sistemas interconectados: la vigilancia colaborativa, la protección de la comunidad, la atención segura y ampliable, el acceso a contramedidas y la coordinación de emergencias.
En este documento se define el concepto de vigilancia colaborativa, y se propone un modelo conceptual, las dimensiones en las que debe producirse la colaboración para permitir la vigilancia de múltiples fuentes y en múltiples sectores, los objetivos principales, y las capacidades concretas para que los países, con el apoyo de la OMS y sus asociados, puedan seguir avanzando en las capacidades de vigilancia y hacer frente a la fragmentación y la insuficiencia en materia de capacidades. El concepto de vigilancia colaborativa se ha elaborado para servir de apoyo a todas las partes interesadas que trabajan en el ámbito de la vigilancia.