La llamada de Cthulhu es un relato o novela corta escrita en 1926, pero publicada por primera vez en febrero de 1928 en la revista pulp Weird Tales. El relato se divide en tres partes: “El bajorrelieve de arcilla”, “El informe del inspector Legrasse” y “La locura del mar”. La historia comienza con Francis Wayland Thurston, quien revisa los papeles de su difunto tío, el profesor Angell, un experto en ocultismo. Francis descubre que su tío investigó un extraño culto relacionado con la figura de Cthulhu, una criatura que apenas guarda rasgos humanos. Al profundizar en la investigación, Thurston encuentra el testimonio de Legrasse, un inspector de policía de Nueva Orleans que en 1908 participó en una redada contra un grupo que rendía culto a Cthulhu. El símbolo utilizado por esta secta coincidía con el que aparecía en el bajorrelieve de arcilla que Angell había estudiado, el cual contenía inscripciones jeroglíficas y otros símbolos desconocidos. A través de documentos, descubrimos que Legrasse y Angell confirman que el culto al monstruo submarino tiene raíces antiquísimas, remontándose a civilizaciones perdidas. Los relatos antiguos describen a este ser inmortal que habita en las profundidades del océano y que despertará cuando las estrellas estén alineadas, trayendo consigo la destrucción de la humanidad. Esta historia recuerda al Leviatán bíblico. En la última parte del relato, el narrador descubre un tercer testimonio relacionado con la criatura de apariencia híbrida entre pulpo, dragón y ser humano. Este testimonio se encuentra en el diario de Gustaf Johansen, un marinero noruego que sobrevivió a un accidente en el Pacífico sur. Durante el incidente, Johansen y su tripulación descubren una isla sumergida que no aparece en ningún mapa: la ciudad de R’lyeh. Este hallazgo confirma la existencia de Cthulhu y la amenaza de su regreso a la Tierra. A lo largo del relato, solo el narrador es plenamente consciente de la importancia de la información que va desentrañando, y los lectores seguimos el hilo de su investigación en el mismo orden en que él encuentra las pistas. La llamada de Cthulhu es considerado un texto fundamental del terror cósmico, un subgénero de la ficción de terror y la ciencia ficción. Además, este relato impulsa la creación del universo mitológico ficticio conocido como los Mitos de Cthulhu, iniciado con cuentos como La ciudad sin nombre y El ceremonial, en los que ya se explora la idea de criaturas provenientes de otros mundos que llegaron a la Tierra en tiempos remotos con el propósito de dominarla. La búsqueda del narrador por reconstruir las pistas que dejó su tío sobre la existencia de esta criatura atrapa y estremece al lector hasta el final (Alma Ediciones, s/p). La prosa de Lovecraft, intencionadamente recargada y con un uso abundante de vocabulario arcaico, provoca el efecto fascinante de un cuento clásico. Uno de los elementos clave de la literatura lovecraftiana es el miedo a lo desconocido, a fuerzas invisibles y adormecidas que, de algún modo, están presentes: acechando en las sombras, susurrando en cada esquina (Alfonso Gutiérrez Caro, Quinto Libro, 2020). La llamada de Cthulhu es uno de los textos más representativos de Lovecraft, con el estilo característico del autor, donde la acción y las descripciones prevalecen sobre el resto de los elementos narrativos (Jaume Vincent).